la tercera edad todavia tiene ganas de fiesta
14584 Veces vista desde el 17.05.2013
Iberiano, 86 años; jubilado y putero. Ha dedicado toda su vida a trabajar y ha amasado una fortuna que no quiere dejar en herencia a los cabrones de sus hijos que le han internado en una residencia en contra de su voluntad. Acaba de llegar y ya la está liando buena. La primera noche la dedicó a conocer gente y a descansar pero a la segunda ya ha montado una orgía con putas para él y sus amigos. Piensa gastar todo el dinero que tiene ahorrado en servicios sexuales y estimulantes pornográficos. En el pueblo ya no podía montar este tipo de fiestas ya que el Ramiro y el Eustaquio hace años que habían faltado pero aquí es todo bien distinto, tiene la libertad que no le daban sus hijos. ¡Que disfrute de lo que le queda a lo grande!.